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Ana SilvaNombre del proyecto: “Conocer para actuar. Propuestas de articulación institucional destinadas a sectores vulnerados de/en una ciudad de rango medio del centro bonaerense en el marco del impacto de Covid 19”[1]

Autora: Ana Silva Lic. Comunicación Social FACSO UNICEN, Dra. Antropología Social FFyL UBA

Disciplina: Comunicación Social – Antropología Social

Campo de aplicación: Ciencias Sociales y Humanas

Directora:Lic.  Patricia Pérez

Lugar de trabajo: (TECC-Fac. Arte/PROINCOMSCI-FACSO UNICEN/CONICET) 

Resumen

Desde distintas perspectivas –epidemiológicas, políticas, urbanísticas, mediáticas- la cuestión de la escala urbana ha sido recurrentemente significada como una dimensión relevante para abordar, gestionar y/o experimentar de manera diferencial el alcance y el impacto de la propagación de la enfermedad causada por el coronavirus SARS-CoV-2.

Este trabajo retoma algunos resultados de investigaciones previas sobre ciudades medias de la provincia de Buenos Aires desarrolladas en el marco del NACT PROINCOMSCI de la Facultad de Ciencias Sociales de la UNICEN, con el propósito de problematizar la cuestión de la escala urbana a la luz de los procesos implicados por las diferentes medidas de aislamiento y distanciamiento social implementadas para hacer frente a la pandemia de Covid-19. En particular, se propone abordar la medianidad como categoría analítica etnográficamente informada que permite indagar en la experiencia de la escala media para un abordaje relacional y situado de la efectivización de dichas medidas en la ciudad de Olavarría.

Palabras clave: antropología urbana, ciudad media, escala urbana, COVID-19

Desde que en los primeros meses de 2020 comenzaron a implementarse en distintos países medidas de aislamiento y distanciamiento social como forma de respuesta a la propagación de la enfermedad denominada Covid-19, pudimos observar que la cuestión de la escala urbana ha aparecido de manera recurrente como una dimensión relevante en relación con los modos de gestionar y/o experimentar el alcance e impacto de la crisis sanitaria. En los medios de comunicación y las redes sociales en Internet empezaron a circular abundantes imágenes de lo que llegó a calificarse como “éxodo” de las metrópolis del mundo. En Argentina, cuando el gobierno nacional disponía por medio del DNU 297/20 el aislamiento social preventivo y obligatorio (ASPO) para todo el país, las pantallas mostraban largas filas de vehículos en las rutas, en los que quienes tenían los medios para hacerlo trataban de abandonar las grandes ciudades para transitar la cuarentena en localidades más pequeñas o en entornos rurales.

Otra faceta de las significaciones asignadas a la incidencia de la escala urbana en la experiencia de la pandemia y el aislamiento social puede reconocerse en relación con el replanteo de las condiciones de vida en las grandes ciudades, y la consideración, bien como anhelo o como decisión pragmática, de la mudanza más permanente a localidades pequeñas. Significaciones nutridas, asimismo, de titulares mediáticos como “Coronavirus en la Argentina. Crecen las consultas para dejar la ciudad y mudarse al campo”, “Por la pandemia muchos abandonan la ciudad”, o “¿Querés dejar la ciudad? Seis pueblos bonaerenses con oportunidades para irse a vivir”, por mencionar sólo algunos de los que pudimos relevar.

Estos y muchos otros modos de asociar escala urbana y pandemia –que por razones de espacio no podremos desarrollar- se entraman en un conjunto de sentidos que plantean varios aspectos desafiantes para la investigación social sobre lo urbano, y que nos propusimos abordar en el marco del proyecto “Conocer para actuar. Propuestas de articulación institucional destinadas a sectores vulnerados de/en una ciudad de rango medio del centro bonaerense en el marco del impacto de Covid 19”.      

La intención es retomar un conjunto de preguntas y reflexiones que devienen de instancias previas de investigación, propias y de otras/os integrantes del NACT PROINCOMSCI, para ponerlas a consideración y en discusión en el marco del proyecto, a fin de evaluar cómo operativizar la escala urbana en relación con los objetivos y el recorte del trabajo empírico que se propone realizar en la localidad de Olavarría, caracterizada como una urbanización de escala media del centro de la provincia de Buenos Aires. Tal como plantean Carla Agüero y Mariano Perelman (2019) a partir de sus investigaciones situadas en ciudades diferentes –concretamente Salta y Buenos Aires-, lo que interesa es poner en discusión la escala urbana como pregunta de investigación.

Es frecuente que en distintas publicaciones académicas el carácter medio o intermedio de las ciudades aparezca referido como un dato descriptivo, sin mayor problematización en la construcción de los respectivos objetos de estudio. O, en otros casos, se le asigna un lugar explicativo como variable independiente de los procesos histórico-estructurales, que suele atribuir una identidad más o menos esencializada a la urbanización de escala media o pequeña. Llamamos a esto determinismo ecológico, basado sobre el supuesto de que a determinadas formas espaciales le corresponderían determinados “contenidos” culturales.

Una referencia central para nuestra propuesta es el trabajo de Silvia Boggi y Nora Galván (2016), quienes realizaron una sistematización del estado de la cuestión sobre las ciudades medias o intermedias, abordando las condiciones de necesidad de su emergencia como tema-problema en los estudios urbanísticos y geográficos desde la década de 1960 en adelante.

Las caracterizaciones más difundidas de la escala media suelen tomar en consideración:

        El tamaño de la urbanización, según la cantidad de habitantes. Las clasificaciones más recurrentes se centran en el número de habitantes como variable definitoria para delimitar el rango medio. Sobre este aspecto, y la necesidad de situar relacionalmente esta clasificación cuantitativa, ver la introducción de Gravano, Silva y Boggi (2016) y Gravano y Silva (2017).  

        La funcionalidad. Otra definición, en general asociada al adjetivo intermedia, suele poner el énfasis en el carácter de intermediación que asume una urbanización dada en un conjunto de flujos de bienes, personas y capital, asociados a la  división territorial del trabajo.

        Menos frecuente es la consideración, que nosotrxs situamos dentro de una perspectiva histórica totalista de lo urbano (Silveira, 2004) y como parte de la producción social de formas espaciales (Castells, 1974), de la dimensión simbólica de la vida urbana. Cabe aclarar que estamos entendiendo a la producción simbólica como práctica material, en el sentido que propone R. Williams (1980) sobre el lenguaje como medio de producción.

A fin de superar los abordajes reduccionistas que consideran sesgadamente uno u otro aspecto, Gravano propone una conceptualización que caracteriza como histórico-simbólico-estructural de lo urbano: “Histórico, porque lo urbano es un resultado y se inscribe en un proceso total dentro de las producciones humanas, no natural ni fuera de las contradicciones que lo constituyen en términos estructurales y lo condicionan en función de determinaciones y desafíos de cada época. Simbólico porque nada de lo urbano deja de existir en una dimensión vivida, interpretada e imaginada por actores sociales, desde racionalidades y sensibilidades también históricamente construidas” (2018: 2).

A continuación buscamos realizar una aproximación relacional y situada a la escala urbana, es decir a la experiencia de la escala en tanto modos socialmente situados de experimentar y co-producir la escala de relaciones.

Es recurrente en el trabajo de campo la referencia a que en la ciudad media “nos conocemos todxs”; pero ¿cómo se pone en juego ese conocerse en situaciones concretas, qué alcances y significaciones adquiere? Y sobre todo, ¿cómo operacionalizar esa experiencia de la escala en el abordaje del entramado de relaciones socio-institucionales que se plantea como dimensión empírica de la investigación? 

Nos detendremos en algunas de las dimensiones de análisis emergentes de investigaciones previas, en particular aquellas que organizan la medianidad, como experiencia de la escala, en torno de las tensiones y relaciones entre el reconocimiento y el anonimato. Estas son:  

        La configuración de tramas de poder (Silva y Gravano, 2017): cuando el reconocimiento se pone en juego en dinámicas de escenificación y reproducción del capital social (Bourdieu, 2002) y de alianzas de clase. Cobran preponderancia algunos apellidos, el ser “de buena familia”, las “recomendaciones”. La activación de estas tramas adquiere un peso significativo en la regulación del acceso al mercado laboral local. En su investigación sobre medios de comunicación en la región, Eugenia Iturralde (2020) ha analizado cómo aparecen estas tramas en la adjudicación de licencias y permisos.

        La construcción y regulación de la “confianza”: aparece en vinculación a la valoración de lazos significados como “solidarios”; también desde versiones más romantizadas de la sociabilidad pueblerina, el conocerse como en una “gran familia” (con resonancias de la oposición comunidad/sociedad). Inés del Águila, en su abordaje de la práctica del “fiado” en almacenes (2018) muestra los modos en que se construye, se ostenta, se sostiene y eventualmente se quita esa confianza. También en el trabajo de Julieta Díaz en este dossier puede verse como un aspecto significativo en el entramado de organizaciones sociales de la ciudad de Tandil, además de la propia inserción en campo como investigadorxs.

        Como control: “acá nos enteramos de todo”. Agustina Girado (2018), en su investigación sobre la problemática del acceso al hábitat en Tandil, refiere dinámicas de habilitación a la participación de los actores en proyectos habitacionales sin requerir garantías adicionales, sobre la base de la “confianza” pero también sobre la explicitación del entramado de relaciones y “contactos” que operan en la ciudad media para la verificación de la información aportada.

        Como “vergüenza” y estigmatización: la identificación y exposición pública de los nombres propios, en ocasiones sostén de la confianza, también la encontramos operando selectivamente, de acuerdo a los actores y situaciones involucrados, como forma de estigmatización. Como prácticas asociadas encontramos la dinámica de chismes y rumores así como la activación de valoraciones morales (Gravano, Silva y Boggi, 2016). En la localidad de Olavarría, un ejemplo reciente lo constituye la divulgación de listas de personas diagnosticadas con Covid-19.

Como podemos advertir, la experiencia de la medianidad no se manifiesta de modo unívoco ni inexorable, sino que es significada y co-producida activamente en condiciones concretas por actores socialmente situados. Entendemos que problematizar la escala como experiencia a partir del conjunto de dimensiones mencionadas contribuye a abrir la sensibilidad analítica a los modos en que la ciudad como trama de relaciones atraviesa las paredes de los espacios institucionales en y con los que se trabaja, modalizando –en lo que interesa a los objetivos del proyecto- la efectivización de políticas públicas.

Bibliografía  

Agüero, G. H. y Perelman, M. (2019) “Desigualdad, imaginarios y escala urbana. Un estudio comparativo de grupos subalternos en Salta y Buenos Aires, Argentina”. En: Vera, P; Gravano, A. y Aliaga, F. (eds.) Ciudades (in)descifrables. Imaginarios y representaciones sociales de lo urbano. Bogotá: USTA-UNICEN. Pp. 187-205.

Boggi, Silvia y Galván, Nora (2016) “Ciudad media, ciudad intermedia: ¿ni chicha ni limonada? En A. Gravano, A. Silva y S. Boggi (eds.) Ciudades vividas. Sistemas e imaginarios de ciudades medias bonaerenses. Buenos Aires: Café de las ciudades. Pp. 25-47.

Bourdieu, P. (2002) Las estructuras sociales de la economía. Buenos Aires: Manantial.

Castells, M. (1974) La cuestión urbana. Madrid: Siglo XXI.

Del Águila, M. I. (2018) “Imaginarios sociales en torno al almacén de barrio: El proceso de construcción de un objeto de estudio a partir del enfoque dialéctico”. Publicar en Antropología y Ciencias Sociales. Año XVI N° XXV. Diciembre de 2018. Pp. 85-100.

Girado, A. (2018) Producir y gestionar la problemática habitacional   de   una   ciudad   media   bonaerense.   Un  estudio  antropológico   de   la agrupación ‘Mujeres Sin Techo’. Tesis de Doctorado. FFyL, UBA.

Gravano, A. (2018) “Propuesta para una conceptualización histórico-simbólico-estructural de lo urbano”. IV Seminario Internacional de la Red Latinoamericana de Investigadores sobre Teoría Urbana. FLACSO Ecuador.

Gravano, A., Silva, A. y Boggi, S. (eds.) (2016) Ciudades vividas. Sistemas e imaginarios de ciudades medias bonaerenses. Buenos Aires: Café de las ciudades.

Gravano, A. y Silva, A. (2017) “Desafíos epistémicos para una(s) antropología(s) de ciudades medias”. En Iluminuras, vol. 18, nro. 45. Pp. 5-12.

Iturralde, M. E. (2020) “Medios audiovisuales en el centro-sudeste bonaerense. Políticas de comunicación en el período 1922–1983”. Improntas de la historia y la comunicación Nro. 8. UNLP. Pp. 2-28.

Silva, A. y Gravano, A. (2017) “Ciudades (medias) y comunicación: cruces, nudos y aperturas”. Inmediaciones de la Comunicación, 12(1). Pp. 39-65.

Silveira, M. L. (2004) “Globalización y circuitos de la economía urbana en ciudades brasileñas”. En: Cuadernos del Cendes. Vol. 21, nro. 57. 

Williams, Raymond (1980) Marxismo y literatura, Península: Barcelona.



[1] Resolución de adjudicación Nº 170/2020 Anexo IF-2020-37418385-APN-SSFCTEI#MCT, en el marco del “PROGRAMA DE ARTICULACIÓN Y FORTALECIMIENTO FEDERAL DE LAS CAPACIDADES EN CIENCIA Y TECNOLOGÍA COVID-19” (MINCyT). Directora: Patricia Pérez.


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