Las elecciones federales de México de 2018, denominadas oficialmente por la autoridad electoral como el Proceso Electoral Federal 2017-2018, se llevarán a cabo el domingo 1 de julio de 2018.

Ya comenzaron los tiempos electorales en México, con los rituales sexenales, donde el pragmatismo o la hegemonía cuantitativa rigen el discurso de quienes aspiran a la presidencia del país.
La lógica que impera en todos los casos es la de cuántos votos gana, cuántos pierde, con tal o cual medida o compromiso que se anuncie o que se calle para no impactar al electorado.
La República se encuentra ante el escenario de la continuidad del proyecto neoliberal, gane quien gane.

Los pueblos originarios de la Amazonía son los que más aportan para su conservación

Durante la conferencia del clima de las Naciones Unidas en Bonn, un grupo de científicos brasileños presentó un nuevo estudio que muestra cómo el país podría llegar a desmatamento zero (deforestación cero) antes del año 2030.
Una de las estrategias principales para lograrlo pasa por proteger un régimen ancestral, efectivo, pero también muy amenazado. Esta solución es el fortalecimiento de los derechos territoriales de los pueblos indígenas que viven en los bosques y que estaban ahí antes de que llegaran los europeos al continente.
Revelan los datos que, con el reconocimiento de los derechos de los pueblos indígenas brasileños —dueños del 30% de la Amazonia brasileña—, el país cuenta con la mejor manera de proteger sus bosques.

¿Por qué son estos pueblos los que proporcionan la única solución a gran escala?

 

      Que el árbol no tape el bosque.

     Tiempo atrás, la desaparición de Santiago Maldonado en el marco de un operativo de la Gendarmería puso en relieve la problemática de las comunidades originarias por  tierras que reclaman como propias.

     ¿Cuánto sabemos acerca de ese reclamo?

 

Hace mucho tiempo, Cortázar redactó este párrafo: “Escribo estas líneas para aquellos que sólo conocen Nicaragua a través de la prensa; simples bosquejos, deseo de agregar a esa información algo que la acerque un poco más al aire que se respira en el país, a lo que la gente dice y hace en su vida cotidiana. Bocetos, más que fotografías: un poco como querer darle mis ojos al lector para que también se eche a andar por sus calles y caminos, y asista lo más directamente posible a algo de lo que allí está ocurriendo”.
Julio Cortázar, 1984

Una tarde de noviembre pasado Felipe Pérez Gamboa, de 24 años, estaba con su hermano Imer en una parcela de siembra dentro de los límites territoriales de su comunidad, cuando un grupo de colonos bajó desde una montaña vecina y empezó a dispararles.
Pérez Gamboa fue el cuarto indígena muerto en medio de conflictos territoriales en lo que iba del año que registra el Centro por la Justicia y Derechos Humanos de la Costa Atlántica de Nicaragua (Cejudhcan).

Se trata de un antiguo cementerio cuya reivindicación se da en el marco del proceso de unidad de las organizaciones y comunidades de la zona, asentadas en las tierras ancestrales del lonko Coliqueo.