|
||||||||||||||||||||||||||||||||||
|
||||||||||||||||||||||||||||||||||
< volver
Arqueología: Lic. Patricia Madrid
Arqueología de los grupos cazadores tardíos de sierras y llanuras en el sur bonaerense La Licenciada Patricia Madrid es: Directora del Departamento de Arqueología del FACSO-UNICEN (1/04/05 a la actualidad), siendo responsable de la carrera de grado de Antropología con Orientación Arqueológica y de la coordinación de las actividades de extensión universitaria y divulgación que se desarrolla desde el departamento a su cargo. Profesora Titular ordinaria de la cátedra Arqueología de Grupos Agricultores Americanos, de la carrera de Antropología con orientación Arqueológica de la FACSO-UNICEN (desde 1999 a la actualidad) Docente/investigadora de la FACSO-UNICEN y de la Facultad de Ciencias Naturales y Museo-UNLP. Su formación profesional se inicia en la UNLP, siendo graduada de la Facultad de Ciencias Naturales y Museo a fines de 1985. Comienza su carrera como becaria del CONICET y posteriormente continúa su tarea de investigación en el marco de proyectos vinculados a esa institución, la UNLP y la UNICEN. Ha integrado y co-dirigido numerosos proyectos nacionales (PID, PIP-CONICET, Proyectos acreditados en la UNLP y UNICEN). Se ha perfeccionado como becaria pasante del proyecto internacional British Council-Fundación Antorchas/UNLP en la Universidad de Southampton, UK, en la década del 90. Entre los años 1999 y 2003 ha realizados tareas de investigación y viajes a Francia como codirectora del un proyecto-convenio binacional argentino francés SECYT-ECOSud entre la FACSO-UNICEN y la Universidad de Rennes, Francia. Ha participado en reuniones científicas nacionales e internacionales como expositora y asistente, desempeñándose como evaluadora en organismos oficiales y en revistas de la especialidad. Se integra a la FACSO-UNICEN en el año 1990 cuando se inicia como auxiliar docente, conformando a partir de ese momento equipos que desarrollan investigación arqueológica en el sudeste de la región pampeana bonaerense. Asimismo, los años marcan su ascenso en la carrera docente, incrementando progresivamente su participación en distintas actividades universitarias, especialmente como consejera académica y consejera superior en distintos períodos de la gestión de esta casa de estudios. Actualmente es miembro del núcleo consolidado de investigación INCUAPA (Investigaciones Arqueológicas y Paleontológicas del Cuaternario Pampeano) de la FACSO-UNICEN, dirigido por el Dr. G. Politis. Dentro de este núcleo, integra el proyecto “Adaptación humana durante el Pleistoceno final y el Holoceno en la región pampeana”. Todas sus investigaciones se han centrado en la arqueología de los cazadores-recolectores del sudeste pampeano, especialmente en momentos tardíos pre y poshispánicos (desde cerca de 3500 años antes del presente), abordando desde una perspectiva regional los estudios sobre sus modos de asentamiento en distintos ambientes de sierras, piedemontes y llanuras; sobre su producción tecnológica (especialmente lítica y cerámica) y sobre aspectos simbólicos desde el estudio de representaciones rupestres. Sus primeros trabajos dieron a conocer asentamientos indígenas de momentos históricos caracterizados por la presencia de construcciones o estructuras de piedra acumuladas -“pirca”-, en su mayoría semejantes a corrales, desconocidos hasta ese momento en el sur del Sistema Serrano de Ventania, en las sierras de Pillahuincó (Madrid 1993). Se propuso que los más de 25 asentamientos detectaban fueron parte de un circuito de traslados de ganado introducido (i.e. oveja) entre la región pampeana por el este y la región cordillerana de Chile y Argentina por el oeste. Posteriores trabajos de otros investigadores demuestran que esta fue una práctica indígena e hispano-criolla desarrollada a nivel interregional probablemente desde momentos iniciales del contacto hispano-indígena hasta mediados del siglo XIX. Esta línea de investigación que enfatiza las actividades aborígenes en tiempos históricos será retomada posteriormente por la investigadora y colaboradores en otros contextos arqueológicos en el Sistema Serrano de Tandilla.
Paralelamente, también en el sistema de Ventania realiza junto a otros investigadores excavaciones en el piedemonte serrano (sitio La Toma) y los estudios de las manifestaciones rupestres en diversas cuevas del sector central de Ventania. Se relevaron paredones de abrigos rocosos cubiertos de pinturas que representan en su mayoría motivos geométricos, lineales, pintados en rojo, que fueron la expresión simbólico-ideológica de las sociedades móviles cazadoras-recolectoras que ocuparon temporariamente estos refugios (Madrid y Oliva 1994). Esta línea de investigación en arte rupestre se prolonga hasta la actualidad pero en el contexto serrano de Tandilla.
Con una perspectiva regional, desde la década del 80 en la llanura interserrana, ha realizado regularmente prospecciones, sondeos y excavaciones sistemáticas en varios sitios arqueológicos a cielo abierto, correspondientes a campamentos de cazadores-recolectores del Holoceno tardío (entre 3500 años antes del presente hasta la conquista hispánica). El objetivo principal fue y es conocer la estructura del registro arqueológico a distintas escalas, regional, microrregional y local. Cómo fueron los asentamientos; qué tecnologías se usaron; cómo se obtuvieron, seleccionaron y trabajaron las materias primas líticas con las que manufacturaron artefactos; qué características adquirieron tecnologías emergentes en el holoceno tardío como la cerámica y cuál fue su rol en el contexto de grupos móviles; qué recursos faunísticos explotaron y con qué estrategias lo hicieron; cuáles fueron los procesos que contribuyeron a la formación del registro arqueológico; estas son algunas de las preguntas principales que abordan las investigaciones aún en curso. Los primeros estudios junto a un equipo multidisciplinario, se centraron en el sector de lagunas próximas a las nacientes del río Quequén Salado, en los actuales partidos de Adolfo Gonzáles Chaves y Tres Arroyos. La localidad arqueológica Laguna Tres Reyes, especialmente el sitio TR1 (Madrid et al. 1991; Madrid y Barrientos 2000; Salemme y Madrid 2005) ha proporcionado significativa información respecto al modo de vida de grupos cazadores del área interserrana bonaerense, aportando numerosas evidencias que permitieron evaluar una serie de hipótesis sobre la subsistencia, formas de asentamiento, tecnología y movilidad que estaban poniéndose a prueba en este y otros sitios de la región. Tres dataciones radiocarbónicas fechas al menos dos eventos de ocupación de los alrededores de la laguna entre 2500 y 1800 años antes del presente. Se recuperaron desechos producidos por el procesamiento y consumo de guanacos, venados y de fauna de menor porte como los armadillos. Numerosos instrumentos líticos, como puntas de proyectil, raederas, raspadores así como núcleos y lascas de rocas locales y alóctonas evidencias la manufactura y uso de artefactos para múltiples tareas. Pequeños fragmentos de cerámica lisa y algunos tiestos incisos y con pintura roja registran la presencia de esta tecnología en momentos tempranos para la región. Se avanzó en los estudios de restos óseos humanos y las prácticas mortuorias a partir de los hallazgos de 10 esqueletos pertenecientes a individuos de distinto sexo y edad que poblaron la región en el pasado reciente. La riqueza del registro en este sitio, su composición, densidad y distribución ha permitido que otros muchos investigadores y estudiantes avanzados de la FACSO-UNICEN concretaran aspectos particulares de sus tesis doctorales y tesis de licenciatura, especialmente sobre bioarqueología y sobre los procesos de formación del sitio.
Desde una perspectiva microrregional, junto a otros investigadores argentinos y durante unos años en colaboración con colegas franceses, se avanzó en el estudio de la ocupación humana de la cuenca del río Quequén Salado, hacia el sur de la Laguna Tres Reyes (Madrid, Politis, March y Bonomo 2002). En el territorio que se extiende desde la Laguna Tres Reyes y el litoral atlántico se han localizado cerca de 15 sitios arqueológicos correspondientes a ocupaciones diversas de cazadores-recolectores que se movilizaban entre la costa y el interior del territorio a lo largo del Holoceno tardío. Varios estudios se han generado a partir de estos hallazgos, particularmente la Lic. Madrid está realizando estudios de petrología cerámica (composición mineralógica de las pastas) con el objeto de conocer y evaluar la variación composicional en relación a su densidad y distribución diferencial en el espacio microrregional. Esta línea de investigación tiene como precedente estudios de muestras alfareras procedentes de varios sitios arqueológicos localizados en otros sectores del sur bonaerense (Madrid 1997).
En los últimos años, además de los intereses particulares de los estudios mencionados, la atención de la investigación se ha dirigido al análisis desde una perspectiva integral del desarrollo cultural pampeano y en el Cono Sur americano, tarea encarada en colaboración (Politis y Madrid 2001; Politis y Madrid 2006). Desde el año 2000, junto a investigadores de la FACSO-UNICEN (G. Politis y V. Pedrotta) y de la UNLP (D. Poiré) se están realizando estudios en el extremo noroccidental de Tandilla, en la localidad conocida como Sierras de Curicó (Partido de Olavarría). Esta localidad arqueológica está constituida por dos cerros enfrentados en los que se registra la asociación de numerosos sectores con pinturas rupestres, la presencia de estructuras de piedra de variadas morfologías y un alero con evidencias de ocupaciones indígenas posthispánicas (Madrid, Politis y Poiré 2000; Politis, Pedrotta y Madrid 2006). Una particularidad destacable es que estas distintas manifestaciones presentan una alineación espacial en dirección este-oeste. La complejidad, calidad y tipo de registro en estas sierras proporciona una posibilidad para comenzar a explorar los componentes simbólico-religiosos de la conducta y sus derivados materiales, en las poblaciones indígenas pampeanas. El conjunto de manifestaciones arqueológicas de las Sierras de Curicó presenta relaciones de proximidad e intervisibilidad, así como la disposición de algunas de ellas exhibe cierta alineación sobre un eje O-E. Esta serie de relaciones estaría dada por la elección de determinados sectores de ambos cerros teniendo en cuenta su microtopografía. La alineación sobre el eje este-oeste podría tener por un lado, un sentido cósmico y representar una visión del cosmos en donde el ciclo solar es relevante. Por otro, la función de este eje puede representar un marcador temporo-espacial significativo. Durante los equinoccios el sol pasa por el plano ecuatorial de la tierra y por ello, es sólo en esos dos días del año que la dirección es exactamente este-oeste.
Para concluir, las líneas de investigación mencionadas brevemente, especialmente en la cuenca del río Quequén Salado y en el extremo norte de Tandilla, se hallan en plena etapa de desarrollo, constituyéndose en una fuente de nuevas evidencias sobre el pasado regional surbonaerense. Asimismo, son una vertiente inagotable de problemas que configuran la base para proyectos de investigación derivados, factibles de ser abordados por jóvenes graduados y aún por estudiantes avanzados que colaboran activamente en los proyectos mencionados. Con ello se quiere destacar que como parte importante de las funciones de docencia e investigación que cumplen los integrantes del Departamento de Arqueología, también está la contribución continua a la formación de recursos humanos. En este sentido, la Lic. Madrid ejerce la dirección de varios tesistas de grado de la FACSO-UNICEN y de becarios doctorales del CONICET y la UNLP.
Referencias citadas en el texto
|
||||||||||||||||||||||||||||||||||
|
||||||||||||||||||||||||||||||||||